Servicio y Ministración
Fuimos condenados a muerte, pero Dios nos amó tanto que, gracias al sacrificio de Jesús en la cruz, hoy tenemos vida eterna.
Fuimos RESCATADOS POR JESÚS PARA ESTAR CON ÉL.
Acompáñanos a nuestros servicios regulares.
Reaccionamos al amor de Jesús anhelando estar más cerca de Él.